Imaginen un lugar para mujeres, y donde otras hermosas mujeres se dedicaran a satisfacer sus necesidades, les ayudaran a relajarse y deshacerse del cansancio, en un ambiente de lujo refinado y cargado de sensualidad. Pues sean bienvenidos al Palacio de los Milagros.
Kiseki Goten de Wako es, como Reijin na Hito, una colección de historias publicadas en la revista femenina Mist magazine (Ohzora Shuppan, 1999).
Nuestro primer "milagro" involucra a Wakana, una joven que se ve incapaz de enfrentar su insatisfactoria relación con su novio. En la estación se encuentra con Mari y juntas llegan en taxi al Kiseki Goten, el Palacio de los Milagros. Una vez allí, Mari se deja seducir por los placeres que el Palacio le depara, pero Wakana se siente incómoda con la abierta sexualidad de las mujeres de allí, hasta que el dueño del Palacio, Ryouko, le asigna a su Mejor Sirvienta, Shizuya, que la lleva a la cama, le da placer durante la noche y le da consejos sobre su relación. Cuando Mari se encuentra con Wakana en el camino de regreso a la ciudad, comenta que Wakana parece una persona nueva. Wakana se da cuenta de que el mundo es un lugar hermoso siempre que puedas enfrentarlo de frente y se dirige a casa, donde le espera un nuevo y brillante futuro.
El segundo "milagro" comienza con la aparición de un anciano en la entrada del Kiseki Goten. Cuando le dicen que los hombres no están permitidos allí, se quita el sombrero, la peluca y los bigotes para revelar que es una modelo realmente famosa, Saikawa Mizuki, y que regresa después de un año para visitar a su antigua novia Reika, una empleada del Kiseki Goten. Aunque Mizuki ha aparecido en la prensa con un cantante masculino popular, anhela unirse a Reika, que ahora es la empleada más popular de Goten. Se reencuentran, pero cuando están haciendo el amor, Reika comienza a llorar; ha visto las noticias sobre el enredo de Mizuki con el cantante ... y un año es mucho tiempo para estar separados. Reika vuelve corriendo a su habitación. Sentada sola, Mizuki recibe la visita del propietario, quien explica que el corazón de Reika se está rompiendo, a pesar de que Ryouko sabe que el cantante masculino es gay. Mizuki se disculpa con Reika y promete no dejarla nunca más. Son despedidos con flores por el personal, mientras se disponen a pasar la vida juntas, para siempre. La nota en las flores promete una terrible reprimenda por parte de Ryouko, si Mizuki vuelve a hacer daño a Reika.
En el tercer "milagro" conocemos a Haruka y Mutsumi, ambas madres solteras, que se toman una noche libre juntas y terminan bailando en la sala de fiesta del Kiseki Goten. Ryouko, el propietario, demuestra un cierto interés por Mutsumi, hacia quien también se siente atraída Haruka, admitiendo finalmente que está interesada en ella y que lo ha estado desde que se conocieron. Las dos pasan la noche juntas y encuentran el amor y el cariño la una en brazos de la otra.
En el "milagro" final, Kobato se encuentra con el dueño del Goten en una exhibición de arte. Sin planes en particular para el futuro, se une al personal como Servant Girl, pero encuentra dificultades para gestionar sus emociones, pues se preocupa por sus clientes más que ellos por ella. Ryouko lleva a Kobato a la cama y le explica que el amor y el sexo tienen muchas formas y que ella también puede encontrar la felicidad. Kobato recupera el equilibrio y continúa su carrera en el Kiseki Goten con entusiasmo. En la última página del manga son recibidos con los brazos abiertos por el personal de Kiseki Goten.
A esto le sigue una galería con algunas de las ilustraciones que Wako ha realizado para sus historias de Mist magazine y, finalmente, un elenco del personal de Kiseki Goten.
En general, un maravilloso interludio de mujeres que aman a las mujeres y dulces historias de sexo lésbico que nos salvan el día. Porque realmente, ¿no es eso lo que todas buscamos en el manga de Yuri?.
